La Paz, 13.02.19 (INE). El director del Instituto Nacional de Estadística, Santiago Farjat Bascón, informó este miércoles que el Producto Interno Bruto (PIB) de Bolivia, al tercer trimestre de 2018, registró un crecimiento de 4,04%. Esta cifra es mayor a la registrada en el mismo periodo de 2017, cuando este indicador llegó a 3,82%.
La autoridad indicó que el desempeño de 4,04% se explica por el dinamismo de los sectores agropecuario 6,95%, establecimientos financieros 5,39%, comercio 4,62%, industria manufacturera 4.22%, entre otros. “El crecimiento se debe al aporte de los sectores agropecuario (0,89 pp.), establecimientos financieros (0,70 pp.) e industria manufacturera (0,69 pp.), que tuvieron mayor incidencia en el PIB durante el periodo enero-septiembre de 2018”, explicó.
Actividad agropecuaria: la de mayor crecimiento
La actividad con mayor crecimiento y mayor incidencia en el PIB fue la Agropecuaria. Al tercer trimestre de 2018, los cultivos tuvieron buenos rendimientos a pesar del estrés hídrico por la excesiva lluvia a principio de año y focos de sequía entre junio y agosto, principalmente en Santa Cruz. Por ejemplo, el maíz creció 17,92%, el arroz 12,24%, la papa 7,98% y la soya 5,58%.
Asimismo, Farjat resaltó el cultivo de caña de azúcar que determinó el crecimiento del sector agropecuario, este cultivo creció en 22,77% en este período, ya que a partir de 2018 se siembra y procesa para la elaboración de alcohol etílico y alcohol anhidro, principalmente.
De igual forma, los productos pecuarios presentaron un buen desempeño en la avicultura y el ganado bovino, este último se ha visto fortalecido por las inversiones privadas en la crianza con miras a la exportación.
La industria manufacturera también registró un crecimiento importante de 4,22%. Debido a la industria química la cual creció en 24,18%, explicada principalmente por la urea que alcanzó una producción de 90.263 toneladas métricas y el alcohol anhidro con una producción de alrededor de 9 millones de litros, este último utilizado como aditivo para aumentar el octanaje de la “Gasolina Especial” (conocida como Súper Etanol 92).
Además, se destaca el crecimiento sostenido de la industria de alimentos que logró cubrir el mercado interno y exportar productos derivados de soya, azúcar y productos beneficiados como castaña, café, quinua, entre otros y la producción de minerales no metálicos con un crecimiento de 6,76%, gracias a la mayor producción de cemento.
En lo que respecta a los establecimientos financieros (5,39%), la Ley de Servicios Financieros ha contribuido en la dinamización de este sector, a través de un mayor acceso a créditos productivos y de vivienda de interés social que crecieron en 27,08% en el período de análisis.
Por otro lado, la actividad de Petróleo Crudo y Gas Natural tuvo una incidencia negativa de 0,10% en el PIB, que se explica por la irregular demanda de gas natural por parte de Brasil y Argentina.
Sectores no extractivos impulsan el crecimiento del PIB
Por último, el titular del INE explicó que los sectores extractivos, que dependen en gran parte del sector externo, tuvieron un comportamiento irregular en los últimos años; en cambio, los sectores no extractivos, intensivos en mano de obra, y dependientes esencialmente de la demanda interna presentaron un crecimiento constante. Hecho que demuestra que la estabilidad y el crecimiento de la economía boliviana se explican principalmente por el dinamismo del mercado interno. “Los datos muestran que la economía boliviana es estable y continúa creciendo”, remarcó la autoridad.
Unidad de Difusión y Comunicación – UDC / INE